Me puse este vestido que estaba guardando para una ocasión especial y salí de mi casa, me encontré con Alex camino a la playa, ese chico que había sido durante tanto tiempo mi mejor amigo y el único capaz de sacarme una sonrisa cuando el mundo se volvía gris, si, lo amaba y el lo sabia.
Mire sus ojos consciente que era la ultima vez que me encontraría con ellos.
¿Como estas? - Me dijo sonriente como siempre. No fui capaz de contestar pero mis ojos los hicieron cuando una lagrima de deslizo a través de mi cara. Miré el papel en mi mano y el me lo quito para también hacerlo. Su sonrisa hermosa de desvaneció.
No es posible - Me dijo.
Lo es - Respondí.
Se acerco a mi y me abrazo fuerte pero tiernamente, las cosas mas simples suelen ser las mas hermosas.
No puedes morir - Dijo algo alterado.
No es mi decisión - Conteste segura.
No puedes morir - Repitió.
Yo... - Intente decir.
Yo te amo - Dijo interrumpiéndome
Las palabras mas hermosas que nunca pensé escuchar de el y no sabia si me quedaba el tiempo suficiente para disfrutarlas.Nos fuimos a caminar por la playa, solo a caminar, hasta que el decidió que el ultimo momento duraría para siempre. Tomo mi rostro y lo acerco al suyo, la distancia se esfumo. Sentí sus labios junto a los míos por un momento eterno, el se separo de mi y sonrió.
Miramos como el papel que permanecía en mi mano se desvanecía entre nosotros.
¿Como es posible? - Dijo.
Supongo que ya tengo una razón para permanecer aquí - Dije sonriendole.
Correspondió la sonrisa y me beso nuevamente, ese fue el momento en el que el sonido de mi celular me despertó de aquel sueño maravilloso. Recibí un mensaje de Alex.
"Quieres ir a la playa hoy? Tengo algo que decirte."
"Claro, nos vemos allá". Respondí.
Me puse el vestido que había estado guardando y me fui a la playa a verlo, por alguna razón, tenia un buen presentimiento.
